Tenía mucha curiosidad por investigar sobre los procesos de deshidratación de algunas frutas, pero necesitaba encontrar una actividad en la que ofrecer a DonDavid ese recurso.

¡Y apareció en nuestras manos el libro “Flaminga de colores”! Justo lo que necesitaba para completar esa actividad…
Este libro es creación de Sole Knudsen y podéis encontrar información sobre ella y su proyecto en www.flamingakids.com o en redes sociales @flamingakids

Flaminga es una flamenca algo coqueta que siente cierta debilidad por cualquier tipo de fruta. Y es tal esa debilidad, que sus plumas acompañan a su paladar… 🙂
En este libro encontraréis unas ilustraciones preciosas, realizadas por ella misma, y lo más importante, conocimiento para los más peques de la casa: frutas, cantidades, tamaños, colores… pero todo desde con un puntito de diversión y textos, muy sencillos y cortos.
Así que, ya teníamos la idea…¡libro+frutras deshidratadas+mesa de luz!

Leí mucho sobre el proceso de deshidratación y podeís usar horno o microondas para llevar a cabo el mismo, pero a mí me apetecía hacerlo de una manera más natural (ecológica).
Corté las frutas en rodajitas finas (no en exceso) y las eché en agua durante una media hora o veinte minutos, con sal y limón (de esta manera evitamos que se pongan negras). Transcurrido ese tiempo las saqué con papel de cocina, para que absorbiese la mayor cantidad de agua. Después, coloqué nuevamente papel de cocina sobre una bandeja de horno y las dejé secar al sol durante algunos días. Aprovechando además que tenemos el radiador encendido durante la tarde, terminé de secarlas poniendo la bandeja del horno encima del radiador.
Para la actividad de luz, sobre acetato, dibujé algunas de las ilustraciones del libro con rotuladores permanentes. Podéis descargaros dibujos de esta flamenca en su propia página web, ¡y de forma gratuita!

DonDavid estuvo leyendo durante algunos días previos a esta actividad el libro. Flaminga se viste con las frutas que yo deshidraté, así que él sabía directamente que el juego consistía en vestir a Flaminga.

Estaba muy ilusionada con esta actividad porque me parece muy completa en todos los sentidos, y especialmente en la estimulación táctil y olfativa. DonDavid es reacio a manipular tactos extraños para él, como ya sabéis muchos de los que nos seguís desde hace tiempo. Así que, aunque ilusionada tenía ciertas expectativas… ¡Y menuda sorpresa me he llevado!

Le ha encantado tocar todo, vestir a Flaminga, oler cada fruta… y explicarnos a Nani2 y a mí, cómo teníamos que oler y tocar cada cosa 🙂

Las frutas deshidratadas son un complemento ideal para la mesa de luz, y con tranquilidad podéis tener unas frutas bien deshidratadas y de manera natural. El libro, sin duda, lo suuuuuper recomiendo para los pequeños de la casa, añadiendo además a todo lo anterior, que sin ser imágenes reales, sus ilustraciones están muy bien definidas.
Podéis conseguirlo desde su página web, pero por si os apetece echarle un ojo, os lo he dejado también para su compra en Amazon y Picker:
https://www.picker.me/l/1a1f4b25
¡A comer mucha fruta!