Juego evolutivo

Siempre hay algo que me llama especialmente la atención sobre cualquier objeto o juego, su versatilidad y aquellas opciones de juego que pasamos por alto. ¡Quédate hasta el final para que pueda compartir contigo mis conclusiones sobre nuestro papel como acompañantes del aprendizaje!

Cuando descubrí este juego en la página de @miquelka, me pareció muy completo y sobre todo versátil y, teniendo en cuenta que el material favorito de DonDavid es la madera, me apetecía mucho probarlo.

Cuando llegó a mis manos estuve un tiempo valorando qué usos tenía, porque como os decía, pienso que muchos se nos escapan, pero también qué usos de ese juego debía ofrecer a DonDavid. No olvidemos que la frustración es necesaria pero en su justa medida.

Antes de seguir leyendo, ¿sabrías identificar el uso de esas piezas y la edad en la que lo usarías en tu hijo/a?

Para mi es un juego bastante evolutivo, que usaría desde el primer año de vida hasta los 5 o 6 años.

En el primer año lo usaría como piezas sueltas del cesto de los tesoros y, al ser rodantes, como piezas de estimulación al gateo. Siempre hay que tener en cuenta que en esta edad, el niño se llevará todo a la boca, por lo que debemos tener especial atención sobre el tamaño y la toxicidad del material.

A partir del primer y segundo año, se convierte en un juego de construcción, de asociación de colores y formas, y acabará siendo un juego de memoria.

A partir del tercer año, podemos empezar a incluir reglas en el juego con el niño, a través del uso de los dados. Pero teniendo en cuenta que es probable que no siga las reglas en el primer momento, pues el ego está muy presente en esta etapa.

Y pasado el cuarto año, podremos incluir el concepto de las series lógicas para que el niño pueda imitar patrones.

Se me ocurren además otros usos como el juego heurístico, piezas para minimundos…

Se lo ofrecí a DonDavid, enseñándole algunos usos del juego, y a sus casi 3 años, lo utiliza para asociar formar y colores, buscar en el saco piezas, construcciones y una pequeña pincelada del juego a través de secuencia lógica, como podréis ver al final del vídeo. Cuando esto ocurre, es decir, cuando le enseño o le dirijo el juego hacia una habilidad, que por regla general, no debería tener desarrollada a su edad, como la secuencia lógica, DonDavid pierde rápidamente el interés sobre el juego y se frustra o me dice que está enfadado.

Hubo otro momento del día, en el que él, por interés propio, cogió la bolsa con las piezas y empezó a jugar, sin mi intervención, y me mostró otro uso del juego que yo había pasado por alto después de pensar mucho en estas piezas. En el vídeo, podréis ver, como coge un dado, y empieza a construir la torre sobre el mismo, pero con la pieza del color que se muestra en esa cara del dado.

Comencé este post pidiéndote que te quedaras hasta el final para poder expresarte mis conclusiones:

  1. Tenemos juegos y materiales con usos y versatilidades muy amplias, y pasamos por alto esa cuestión antes de retirarlos.
  2. Cada destreza o desarrollo de la habilidad en un niño tiene una edad. Es muy necesario observar qué puede hacer, para no forzar a que haga algo para lo que no está preparado y que la frustración pueda hacerle perder el interés completamente.
  3. El niño tiene una mente increíblemente creativa. Opino que es necesario dejarle espacio en ese momento de creatividad sin querer dirigir en todo momento una actividad.

Mientras escribía este post, pensaba que estaba escribiendo el anuncio de un juego :), pero es que sobre los juegos que @miquelka crea no se puede hablar de otra forma. La autora de esta marca, es una artesana que trabaja el juego a través de piezas de madera pintadas a mano con pintura no tóxica. Para mi, son piezas y juegos que se diferencian y se distinguen por su creatividad… pero no quiero seguir escribiendo lo que sigue pareciendo un anuncio 🙂 , ¡solo tenéis que pasaros por su cuenta para echar un ojo a su material! Podéis seguirla a través de Instagram en la cuenta @miquelka y ver ahí todas sus artesanías.

¡Os dejo un vídeo con nuestro ratito de juego!

Y a ti, DonDavid, te debo este último párrafo… Fue necesario que me dijeses dos veces que estabas enfadado y triste para que me diese cuenta que solo querías construir y derribar, así que la siguiente procuraré que solo sea una. 🙂

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: