Os dejo por aquí un par de adornos más que hemos hecho esta semana para nuestro árbol de Navidad. Realizados, en gran parte, con materiales naturales. ¡Os explico cómo!

Compré en un bazar una estrella de corcho blanco y un martillo de madera.

Puse a DonDavid, las cáscaras de varias nueces para que las partiera en trocitos con el martillo. ¿Romper cosas? ¡Éxito seguro! 🙂

Después, con silicona caliente, yo fui pegando esos trocitos de nueces a la estrella de corcho blanco (esta parte la hice sin él delante, porque controlar la silicona caliente y la velocidad de sus manos es misión casi imposible).
Por último, pintó con témpera blanca, algunas zonas de las nueces, ya pegadas en la estrella, para darle un toque de imitación a la “nieve”.

En la zona de atrás no puse nueces, porque aumentaba el peso de la estrella bastante, y pegué un bolsillo de fieltro o una cinta, que ataré a la rama superior del árbol de Navidad, sujetando así la estrella en la parte alta.
El búho lo hice yo sola. Me apetecía mucho soltar mi imaginación y crearlo con el mayor número de elementos naturales y fue mi ratito de desconexión.

Pegué algunas cáscaras de nueces con silicona caliente imitando la forma de las alas.
Los ojos son dos cúpulas de un par de bellotas, a las que pinté la zona interior de blanco y les pegué un par de pompones negros.
El pico es un trozo de nuez con forma triangular, ¡estuvo bastante entretenido ir buscando entre cientos de trozos el que tenía forma de pico! 🙂

Por último pinté un poquito de blanco la zona de la barriga de búho y las alas, y pegué con silicona caliente una ramita sobre la que se posaría el búho.
Este año, nuestro árbol estará adornado con piñas. ¡Pronto os mostraré al resto de la “trupe”!